
Ayer BioWare hizo oficial la inesperada renuncia de Casey Hudson, el que ha sido director de la trilogía Mass Effect y uno de los pilares creativos de la compañía desde hace más de una década.
El anuncio, que puede leerse en inglés en el blog oficial de BioWare, explica su marcha aludiendo a la necesidad de "tomarse un descanso muy necesario para tomar pespectiva de qué desea hacer en la siguiente fase de su vida y, eventualmente, emprender nuevos desafíos".
Este momento le ha parecido el mejor para marcharse de BioWare debido a que los cimientos de los próximos proyectos de la compañía ya están suficientemente asentados y su desarrollo puede proseguir sin él. Citando una carta que el propio Hudson ha escrito para despedirse de sus compañeros: "La fundación de la nueva IP de Edmonton se ha completado y el equipo está listo para empezar con la preproducción de un título que creo que redefinirá el entretenimiento interactivo. El desarrollo del nuevo Mass Effect también va a buen ritmo, con recursos increíbles y builds jugables que demuestran que el equipo está preparado para ofrecer la mejor experiencia de Mass Effect hasta la fecha. Y el equipo de Dragon Age: Inquisition está dándole los últimos retoques a un título realmente ambicioso con algunos de los gráficos más bonitos que nunca he visto en un juego".
Casey Hudson comenzó a trabajar en BioWare como artista técnico. Aunque todavía modestas, sus primeras aportaciones se dejaron ver en juegos tan míticos como MDK 2 y Baldur's Gate 2: Shadows of Amn. Su grado de participación aumentó en Neverwinter Nights y finalmente consiguió hacerse cargo de la dirección de Star Wars: Caballeros de la Antigua República y su sucesora espiritual, la trilogía Mass Effect.
Hasta la fecha de anunciar su dimisión, Hudson se encontraba alternando labores de supervisión del nuevo Mass Effect, el primero al margen de la trilogía de Shepard y opera prima del nuevo estudio de Montreal, con la gestación de la nueva IP del estudio, que supuestamente se presentará este mes en la Gamescom.
Durante sus casi 16 años en la compañía Casey Hudson ha protagonizado una carrera meteórica que le ha llevado de empezar como chupatintas a convertirse en uno de sus principales altos cargos. A pesar de su importante labor, desde la publicación de Mass Effect 3 su figura se ha visto bastante discutida por los fans después del polémico final de la trilogía, al parecer trazado por él y Mac Walters de forma unilateral, sin contar con el resto del equipo de guionistas.
Verse desprestigiado y responsabilizado por ciertas decisiones creativas podría haber contribuido a dejarle bastante quemado, aunque esto ya es entrar en el terreno de la especulación. Si la versión oficial es la milonga de "buscar nuevos retos" es que ninguna de las dos partes tiene interés en hacer públicos más detalles sobre esta decisión, así que solo nos queda aguantarnos la curiosidad y desearle a Casey Hudson la mejor de las suertes en sus nuevos proyectos.